Ya estoy de vuelta

Desde septiembre de 2007 no escribo nada en este blog. La verdad es que ha ocurrido de todo en este tiempo e intentar contarlo en dos párrafos lo considero tarea imposible.

Hoy por hoy, me alegro de estar en Tánger por muchas razones, pero la más importante sigue siendo porque me gusta el país y su gente.

He conocido ya a varios españoles que vinieron obligados por sus circunstancias personales y no lo llevan muy bien, de alguna manera se creen superiores y ese complejo se nota en el trato con el público y los marroquíes no son tontos. Si les haces putadas, te las devuelven multiplicadas por 10, y tras dos o tres gordas te entra la depresión.

Yo creo que el truco está en ir de buena gente por la vida, y si se piensan que eres tonto entonces les haces ver que no es así, pero lo más importante es tratar a los demás de igual a igual, aunque tú estés mejor, la prepotencia y la superioridad sólo sirven para crearte complicaciones en este país.