Veranear en Marruecos

Verano en Marruecos

Veranear en Marruecos

Veranear en Marruecos es una elección interesante. Marruecos es un destino exótico a la par que económico para veranear, y nos ofrece un abanico de opciones muy interesantes.

Si vamos con la familia o con un grupo de amigos, podemos optar por alquilar una casa/riad en cualquier medina del país: Fez, Marrakech, Tánger, Rabat, etc., que generalmente también lleva incluido la opción de servicio doméstico con limpieza y cocina. Esta opción es estupenda porque nos permite aclimatarnos a la ciudad formando parte de ella. Alojarnos en el corazón de la ciudad antigua nos permitirá tomarle el pulso a la cotidianidad, viviendo al ritmo de sus habitantes, sintiendo el canto del muecín, el pregón de los vendedores ambulantes, las charlas entre vecinas…

Los Riads son remansos de paz, y muchos de ellos tienen piscina para aliviar el calor del verano.

Riad en Marrakech

Otra opción puede ser reservar una semana de hotel en la playa. Entre las playas del norte y las del sur, hay una gran variedad de pueblos y ciudades costeras donde poder pasar unos días durante el verano, sin preocuparnos de hacer la cama ni recoger la casa. Solo dedicados a pasear, tomar el sol, bañarnos en las limpias aguas del Atlántico o del Mediterráneo y dedicarnos al dolce fare niente. Veranear en Marruecos es muy económico desde este punto de vista, con ofertas que pueden variar desde los doscientos euros en adelante en alojamiento y desayuno por persona. Por suerte, comer o cenar es bastante barato, y podemos gastar muy poco si queremos.

También está la opción del todo incluido, para los que van mejor de dinero, con grandes resorts hoteleros que ofrecen veranear en Marruecos por todo lo alto. En este sentido, hay ofertas de semanas completas en Saidia, en la costa mediterránea o en Agadir, en la costa atlántica, ya que ambas ciudades están orientadas al turismo extranjero que prefiere tenerlo todo incluido y no tener que moverse de su hotel.

Otra alternativa, y no menos interesante, es la de optar por el turismo interior y pasar una semana en algún lugar de montaña, como Chaouen o Ifrán, donde podremos hacer senderismo, bañarnos en ríos de aguas cristalinas y tomar productos de la tierra cuyo sabor ya no seríamos capaces de reconocer en nuestros lugares de origen. No por ser turismo rural es menos atractivo, pues en el caso de estas dos ciudades hay oferta hotelera de calidad.

Por último, tenemos la oportunidad de veranear en Marruecos haciendo un circuito por el país, para aquellos viajeros que prefieren conocer varios lugares en vez de quedarse quietos en un sitio. Para eso, Marruecos es un país ideal, pues ofrece sierra, playa, desierto, frío o calor, a lo largo de toda su extensión. Hay circuitos de ocho días, de cinco días, o a la carta, pudiendo elegir si viajar con conductor y vehículo privado, o viajar en grupo compartiendo con otros viajeros la experiencia, o alquilar un coche y lanzarse a la aventura.

Ven y descubre marruecos este verano.